
El ministro de Finanzas israelí, el fascista y colono Bezalel Smotrich, ha confirmado que Gaza podría ser una «bonanza inmobiliaria», una gran oportunidad de mercado. Según ha presumido, su Gobierno ya está manteniendo conversaciones con la Administración de Trump para repartir las ganancias de un presunto «plan de negocios» destinado a explotar económicamente la devastada Franja palestina.
«Pagamos mucho dinero por esta guerra, así que tenemos que dividir cómo obtenemos un porcentaje de la comercialización de terrenos más adelante», ha declarado el ultraderechista en una conferencia inmobiliaria en Tel Aviv. «Ya hemos completado la fase de demolición, que siempre es la primera fase de la renovación urbana. Ahora tenemos que construir. Es mucho más barato», ha señalado. Sus palabras van en sintonía con las del ministro de Defensa, Israel Katz, que ha vuelto a hablar de la «destrucción total de Ciudad de Gaza». Con la destrucción de la Franja, Tel Aviv sigue sumando objetivos, también económicos, y cataloga al enclave como «una mina de oro».