
El viernes 9 de mayo ha tenido lugar en el cementerio de Fuencarral el acto de celebración en Madrid del 80 Aniversario del Día de la Victoria ante el conjunto escultórico en homenaje a los soldados soviéticos que participaron en la Guerra Antifascista del estado español, adornado con coronas de flores en nombre de las embajadas en Madrid de Rusia, Kazajistán, Bielorusia, Armenia y Azerbayán.
Dicho cementerio fue elegido por el general Lúkacs de la XII Brigada Internacional para que descansaran los cuerpos de más de cuatrocientos brigadistas caídos en la guerra, y alberga diferentes placas alusivas a las distintas nacionalidades de los brigadistas (británicos, estadounidenses, canadienses, irlandeses, italianos, polacos, cubanos, chipriotas, yugoslavos y judíos), así como un monumento que conmemora a su vez a los combatientes del Estado español en la Segunda Guerra Mundial.
En este acto han tomado la palabra Victoria Samoylova (organizadora del Regimiento Inmortal en Madrid), Dmitry Yakovlev (Segundo Secretario y Vicecónsul de la Embajada de Rusia en España), Koldo Salazar (Embajador del Festival Mundial de la Juventud en España) y un representante de Izquierda Castellana.
Intervención de Izquierda Castellana
Buenos días,
Hoy celebramos este acto ante el monumento a los soldados soviéticos, y el domingo celebraremos el 80 Aniversario del Regimiento Inmortal. Y queremos en primer lugar agradecer vuestra invitación, y señalar que para nosotros/as, participar en estas celebraciones es un auténtico orgullo.
Vivimos tiempos complicados, en los que asistimos a un ejercicio brutal de manipulación de la memoria histórica, como ocurre respecto al tema de la Gran Guerra Patria. Pese a esa manipulación de la memoria histórica, queremos destacar que Madrid fue la primera capital europea que derrotó lo que fue el primer levantamiento militar fascista en el marco geográfico europeo.
El 18 de julio de 1936, en Madrid, como en buena parte de las ciudades del Estado español, la fracción fascista del Ejército español y sus apoyos civiles y económicos siguieron la consigna de sublevarse. Y en Madrid este levantamiento fue derrotado por la ciudadanía, por el pueblo. Una buena parte de los militares facciosos y miembros de la Falange se refugiaron en el Cuartel de la Montaña (situado cerca de donde está la actual sede del PSOE y derruido durante el franquismo). El pueblo, sin apenas armas, asaltó el Cuartel y derrotó el plan inicial de los fascistas, que era el golpe de estado, impidiendo un ataque sobre el conjunto de la ciudad, y consiguiendo por lo tanto la primera gran victoria contra el fascismo.
Finalmente el antifascismo en el Estado español perdió la guerra, debido entre otras cosas a diversas traiciones que se dieron -y en las que no podemos entrar en esta breve intervención-, así como a una correlación de fuerzas totalmente desfavorable, en la que hay que destacar la participación activa de los ejércitos fascistas y nazis europeos, así como la colaboración directa e indirecta con Franco de las principales potencias occidentales.
A pesar de ello, estamos altamente satisfechos de esta contribución por parte del pueblo trabajador de Madrid a la lucha internacional contra el fascismo, al igual que estamos orgullosos de los episodios del 2 de Mayo de 1808, en contra de la invasión del imperio napoleónico.
Por último, queremos destacar el papel fundamental de la Unión Soviética para el sostenimiento de nuestra guerra antifascista, mantenida durante tres años en buena medida por la ayuda material de aquel país, única potencia que además, una vez derrotados los ejércitos nazis, exigió que el Régimen franquista español fuera depurado.
Un saludo afectuoso de la militancia de Izquierda Castellana.
¡No pasarán!
9 de mayo de 2025