China se opone a cualquier acto que infrinja la soberanía y la seguridad del Líbano y expresa su preocupación por la posible escalada de tensiones en la región que este incidente podría desencadenar, dijo el jueves un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China. Las declaraciones se produjeron después de que los ataques con buscapersonas y bombas de radio en el Líbano causaran numerosas muertes y no dejaran a ningún sospechoso identificado.
Una serie de explosiones a gran escala de equipos civiles puso de relieve las crecientes amenazas que plantea la militarización de dispositivos electrónicos civiles en la guerra moderna, dijeron expertos chinos, que señalaron las lagunas de seguridad de la cadena de suministro global de dispositivos de comunicación civil.
Las radios portátiles utilizadas por el grupo armado Hezbolá detonaron el miércoles en el sur del Líbano en el día más mortífero del país desde que estallaron los combates transfronterizos entre los militantes e Israel hace casi un año, informó Reuters.
La agencia citó al Ministerio de Salud libanés diciendo que 20 personas murieron y más de 450 resultaron heridas el miércoles en los suburbios de Beirut y el valle de Bekaa, mientras que el número de muertos por la explosión de los buscapersonas del martes aumentó a 12, incluidos dos niños, con casi 3.000 heridos.
China está siguiendo de cerca el incidente relevante. Nos oponemos a todo acto que infrinja la soberanía y la seguridad del Líbano y expresamos nuestra preocupación por la posible escalada de las tensiones en la región que pueda desencadenar este incidente. China pide a las partes pertinentes que salvaguarden seriamente la paz y la estabilidad en Oriente Medio, dijo el jueves Lin Jian, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China.
El ministro libanés de Información, Ziad Makary, condenó el martes la detonación de los buscapersonas -dispositivos portátiles que Hezbolá y otros en el Líbano utilizan para enviar mensajes- como una «agresión israelí». Hezbolá dijo que Israel recibiría «su castigo justo» por las explosiones, informó AFP.
Sin embargo, hasta el momento no ha habido comentarios de Israel. «El centro de gravedad se está moviendo hacia el norte», dijo el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, durante una visita a una base aérea el miércoles, según AFP.
Israel bombardeó el sur de Líbano el jueves y dijo que había frustrado un «complot de asesinato respaldado por Irán». Los servicios de seguridad israelíes dijeron el jueves que habían arrestado a un ciudadano israelí el mes pasado bajo sospecha de estar involucrado en un «complot de asesinato respaldado por Irán». El empresario con conexiones en Turquía había asistido al menos a dos reuniones en Irán para discutir el asesinato del primer ministro Benjamin Netanyahu, el ministro de Defensa o el jefe de la agencia de espionaje Shin Bet. Durante la noche, aviones y artillería israelíes alcanzaron múltiples objetivos en el sur del Líbano, dijo el ejército israelí.
Enfoque
poco humanitario Los ataques con explosivos han provocado olas de condena en todo el mundo. El jefe de derechos humanos de las Naciones Unidas, Volker Turk, dijo que el ataque del martes se produjo en un «momento extremadamente volátil», y calificó las explosiones de «impactantes» y su impacto en los civiles de «inaceptable».
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, instó a los gobiernos a «no convertir los bienes civiles en armas».
Las explosiones no sólo aumentaron las tensiones en el ya volátil Oriente Medio, sino que también han difuminado las líneas entre el equipo militar y el civil, lo que ha dado lugar a unaEl número de víctimas y heridos incluso entre los civiles es incalculable, lo cual es poco humanitario, dijo el jueves Liu Zhongmin, profesor del Instituto de Estudios de Oriente Medio de la Universidad de Estudios Internacionales de Shanghai.
Liu dijo que el uso de dispositivos de comunicación para atacar a personal armado presenta nuevos desafíos para la seguridad internacional. Dijo que este enfoque podría exacerbar aún más los conflictos regionales. Los expertos chinos señalaron que las explosiones ocurrieron en un momento delicado en el que el mundo se está centrando en mediar con la creciente tensión entre Hezbolá e Israel.
Altos diplomáticos de Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Francia e Italia tenían previsto reunirse el jueves en París para discutir la espiral de tensiones en Oriente Medio, dijeron fuentes a la AFP, antes de una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU prevista para el 20 de septiembre (viernes).
Quienquiera que esté detrás de las explosiones seguramente no quería la paz en Oriente Medio, ya que nuevas rondas de venganzas aumentarán el riesgo de conflictos más amplios, dijo Qian Feng, director del departamento de investigación del Instituto Nacional de Estrategia de la Universidad de Tsinghua, al Global Times el jueves.
Israel
llevó a cabo su operación contra Hezbollah el martes al esconder material explosivo dentro de un nuevo lote de buscapersonas fabricados en la isla de Taiwán e importados al Líbano, informó el martes The New York Times, citando a funcionarios estadounidenses y de otros países informados sobre la operación.
Los buscapersonas, que Hezbollah había ordenado a la compañía Gold Apollo en Taiwán, habían sido manipulados antes de que llegaran al Líbano, según citó el New York Times a algunos de los funcionarios estadounidenses. La mayoría eran el modelo AR924 de la compañía, aunque también se incluyeron otros tres modelos Gold Apollo en el envío.
La compañía taiwanesa dijo en un comunicado el miércoles que autorizó su marca en los buscapersonas que explotaron en Líbano y Siria, pero que los buscapersonas en realidad se fabricaron en Hungría.
Sin embargo, las autoridades húngaras lo negaron, diciendo que la firma de Budapest era un «intermediario comercial» sin sitios de fabricación en el país, según CNN.
Los expertos le dijeron al Global Times que es inusual planear explosiones a gran escala en dispositivos electrónicos personales. Los buscapersonas y los ataques de radio resaltan aún más el creciente peligro de convertir los dispositivos de comunicación civiles y otros equipos electrónicos en armas en la guerra moderna, dijeron expertos chinos que advirtieron sobre las lagunas de seguridad expuestas por las cadenas de suministro internacionales.
También es posible que alguien haya implantado explosivos dentro de esos dispositivos después de que fueron enviados, dijo Qian.