Sin capacidad de analizar y comprender la realidad es imposible construir alternativas transformadoras

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Sin capacidad de analizar y comprender la realidad es imposible construir alternativas transformadoras

Vivimos tiempos complejos, no siempre fáciles de comprender, y no solo porque los que detentan el poder político, económico y mediático hagan todo lo posible para que esto ocurra, sino porque se están produciendo cambios profundos y sin investigarlos es imposible hacerse una composición de lugar adecuada. La desinformación y la manipulación mediática siempre son herramientas clave para el Sistema, pero en coyunturas como esta, en la que demuestran su extrema debilidad y, por tanto, se pone de manifiesto la posibilidad de que sean derrotados, la necesidad de impedir el conocimiento de la realidad-real adquiere para el enemigo una especial importancia.

Es una coyuntura muy especial, porque la debilidad estructural del capitalismo imperialista les lleva a tomar medidas extremadamente antipopulares para mantener sus expectativas de beneficio. La agenda de la llamada “transición energética” o la “Ley de Restauración de la Naturaleza”, que por cierto se somete a votación estos días en el Parlamento Europeo, son dos claros ejemplos de ello. Visten propuestas claramente reaccionarias y antipopulares de progresistas y ecologistas, a ver si cuelan, aunque cada vez sectores más amplios son conscientes de lo que realmente está en juego. La oposición en los Países Bajos a esa “Ley de Restauración de la Naturaleza” ha generado unas importantísimas movilizaciones sociales, sobre todo en el mundo rural, y una crisis de Gobierno, con la consiguiente convocatoria anticipada de elecciones. Ya veremos los resultados.

La UE y la OTAN están atravesando la crisis de mayor alcance de su historia. Rusia obviamente no se encuentra exenta de problemas, pero estos nada tienen que ver con las previsiones que se hacían desde el mundo occidental. S. Lavrov, el Ministro de Exteriores ruso, ha afirmado en una reciente declaración algo que venimos diciendo en Comuner@s desde hace largo tiempo: “No estamos en una nueva guerra fría”; estamos en un escenario en el que el imperialismo, con todas sus dudas y vacilaciones, está preparando e implementando una “guerra caliente”, nada menos que la III Guerra Mundial. Por otro lado, un movimiento que de una u otra forma implica a la mayoría de países del mundo apuesta ya por la construcción de un nuevo orden internacional de carácter multipolar.

El triunfalismo de la OTAN y sus voceros, especialmente el español/catalán Josep Borrell, durante los primeros meses del conflicto, y aun ahora, expresa su apego a la fantasía y demuestra su pérdida de capacidad cognitiva, además de evidenciar su ideología reaccionaria y proimperialista, describiendo a una Rusia aislada internacionalmente y en un estado ruinoso, a punto de implosionar. Hacía tiempo, quizá desde que Hitler abrió el frente oriental contra la URSS, que la confusión entre los deseos y la realidad no era tan evidente.

Un instante de la Cumbre de la OTAN en Vilna

Los hechos reales demuestran que Rusia tiene numerosos e importantes aliados a nivel internacional, que su economía se mantiene razonablemente bien y que su sistema político, al menos de momento, no se tambalea de manera ostensible. Visto con un poco de objetividad, donde parece que se acumulan los problemas es en los espacios del capitalismo occidental (los EEUU y la UE). Es imprescindible que se avance en el multilateralismo y en la solución política de los problemas internacionales. En el movimiento comunero del siglo XXI tenemos esa posición, pero ello no nos lleva a obviar la necesidad de defender los intereses de nuestro pueblo y nuestra tierra con todos los recursos necesarios.

El 23 de julio habrá elecciones generales en el Estado español, en la que salvo imprevistos destacados, se materializará el cambio de ciclo con la alternancia entre la izquierda del Régimen del 78 y su derecha. El nuevo Gobierno, sea cual sea, tendrá que adaptarse a las nuevas pautas presupuestarias, fiscales y represivas de la UE y de la OTAN, pautas brutalmente reaccionarias. Ya se ha aprobado el proyecto de presupuestos en Alemania que sirve de referencia para todos los países de la UE: el conjunto de partidas, excepto la destinada a Defensa, disminuye de manera drástica, muy especialmente en Sanidad (el próximo editorial lo dedicaremos específicamente a esta cuestión).

Estos días se ha conocido el cambio completo del equipo de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, donde los antiguos gestores han sido sustituidos por conocidos expertos de la sanidad privada. No es difícil intuir lo que nos espera. Es decisivo que desde los movimientos en defensa del Sistema Sanitario Público se haga una reflexión rigurosa y documentada acerca de ello para poder construir una línea de lucha eficiente contra las barbaridades que tienen previstas. Por otro lado, el cierre total durante varios meses de la Línea 1 del Metro de Madrid, que es utilizada masivamente por los/as vecinos/as de Vallecas para ir al centro o a los barrios ricos de Madrid, afecta de forma principal a la población trabajadora, pero muy especialmente a las mujeres inmigrantes, sobre las que recae en gran medida el trabajo doméstico y el cuidado de personas mayores y niños/as. No podemos quedarnos de brazos cruzados ante esta agresión a las clases trabajadoras del popular y emblemático barrio de Vallecas.

Entrada al Metro en Puente de Vallecas

En la coyuntura en que vivimos es posible construir las fuerzas para un auténtico cambio social, político y cultural. Para materializarlo es necesario aplicar el máximo de inteligencia colectiva y de conocimientos, además de la acción decidida. Es por ello que insistimos tanto en nuestros editoriales en la necesidad del estudio, la reflexión y el uso de la herramienta de la racionalidad como principales recursos para l@s revolucionari@s. Por supuesto, hemos de buscar también en cada caso el mayor número de apoyos para que la lucha práctica tenga visos de salir victoriosa. La irracionalidad y el sectarismo están entre los más importantes enemigos del movimiento revolucionario en la actualidad.

Avanzaremos y venceremos.

12 de julio de 2023

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