La movilización en barrios y pueblos de Madrid contra la monarquía corrupta y su régimen de miseria, que tuvo una primera expresión global en la manifestación del 25 de julio, no nos cabe duda alguna que significa el inicio del fin del régimen de la corrupción, de la vergüenza y de la indignidad.
Cerca de 1500 personas, en su mayoría activistas de movimientos políticos y sociales de barrios y pueblos nutrieron esa manifestación.
Y ese era el gran objetivo de los/as organizadores. No pretendíamos en esta ocasión una manifestación de decenas de miles de personas, que ya llegarán. No, en las actuales circunstancias de pandemia y en plena canícula lo que se pretendía era agrupar a la mayor parte posible de las fuerzas militantes de Madrid alrededor de un proyecto político compartido, que no puede ser otro que la denuncia de la monarquía corrupta y su sistema de miseria, así como la reivindicación de la República Popular; y este objetivo se ha conseguido plenamente.
Es de destacar la actitud de la inmensa mayoría de los medios de comunicación/manipulación españoles, no por previsible menos escandalosa: toda la brigada mediática, tanto su «flanco izquierdo como derecho» , ignoraron la convocatoria; y no por que no se les hubiera informado de ella. La consigna del Régimen fue seguida a pies juntillas: «A esos ni medio párrafo». Muy diferentes fue la actitud de los medios de comunicación internacionales que hicieron una amplia cobertura de la manifestación: France TV24h, BBC; CNN; Ruptly.tv; ARD(Tv alemana) ; RT, sputniknews tv, Hispan TV… finalmente, nos imaginamos, porque ya era imposible ignorar la realidad, varios medios del Estado español, entre otros TVE, TeleMadrid… cubrieron el evento
Los poderes fácticos, incluyendo los mediáticos, son conscientes de que su régimen está en fase terminal e insisten y lo harán aún más en el futuro en la represión y en la manipulación. No les va a servir de nada. Esto se parece cada vez más a la última fase del régimen franquista, pero en esta ocasión no tienen nada que ofrecer con un mínimo de gancho o de credibilidad. Nosotras/os a lo nuestro, a construir organización y movimiento popular. Es decir, poder popular.