Según han comunicado a esta publicación miembros de la UVA (Unión Vecinal Asamblearia) y de CGT en el Ayuntamiento de Móstoles, existe una altísima preocupación tras conocerse contactos y reuniones en las que se está ninguneando al sindicato CGT y en las que miembros del comité de empresa y responsables del Ayuntamiento están trabajando para reducir el personal nuevamente de las escuelas infantiles.
Mientras que el Ayuntamiento no ha parado de subir los precios de las escuelas públicas, continúa financiando los centros privados con cien euros por plaza, lo que provoca en la práctica que los segundos sean más baratos que los primeros, provocando así un traslado de las matrículas desde los centros municipales hacia los subvencionados de carácter privado.
En la práctica esto supone el desmantelamiento de un sistema público de educación infantil, y una vez que este desaparezca, nadie garantiza que los precios de los privados no vayan a subir en una jugada bastante habitual en la gestión de servicios y en el desmantelamiento de todos los sistemas públicos de protección social, además, los ingresos de las escuelas infantiles de gestión pública revierten en las arcas municipales para beneficio del común mientras que los de gestión privada se quedan en manos de quienes los gestionan exclusivamente.