Comando Violeta exige la despenalización total del aborto en los muros de Cuenca

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comandovioletaAyer Comando Violeta volvió a pegar carteles en los muros de nuestra ciudad exigiendo que se respete el derecho a decidir de las mujeres sobre sus cuerpos y que, si lo requiere, su decisión sea atendida por la sanidad pública. En los carteles podía leerse el siguiente mensaje:

Aborto sí, aborto no… ¡Eso lo decido yo!

Los gobiernos del PPSOE, al servicio del sistema heteropatriarcal, no quieren que ejerzamos nuestro derecho a decidir sobre nuestra vida, maternidad y sexualidad. Una forma más de perpetuar la sumisión y dominación de las mujeres.

La actual ley, no avanzó hacia la despenalización total del aborto, por lo que no responde a las necesidades reales de todas las mujeres.

Por eso, no sólo pedimos que se retire el anteproyecto de Ley de Protección de la Vida del Concebido y los Derechos de la embarazada, sino que además…

SEGUIMOS EXIGIENDO:

– Que se reconozca, garantice y respete nuestra capacidad de decisión al enfrentarnos a un embarazo no deseado, sin ningún riesgo físico o jurídico ni para nosotras ni para el personal sanitario.

– Que nuestra decisión personal sea la única causa para la interrupción o no del embarazo, sin que esta venga impuesta o motivada externamente por nadie, ni por supuesto, ni plazos.

– Que la interrupción voluntaria de embarazo deje de estar tipificada como delito dentro del Código Penal y pase a ser regulada como el derecho de toda mujer a decidir sobre su maternidad.

– Que la práctica del aborto sea garantizada y normalizada a través de la red sanitaria pública, de forma accesible, segura, gratuita y respetando la privacidad e intimidad, para todas las mujeres independientemente de nuestra edad, estado civil o nacionalidad.

– Que se trabaje en la prevención de abortos no deseados, a través de educación sexual libre de estereotipos; y anticonceptivos libres y gratuitos a cargo de la Seguridad Social para hombres y mujeres e investigación de nuevos métodos.

Ni del estado, ni de la iglesia… ¡Mi bombo es mío!”

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