
La Unión Vecinal Asamblearia de Móstoles (UVA) y la Red Distrital de Móstoles (RDIIS) han realizado una encuesta y estudio sobre la situación de la población desempleada de Móstoles, que fue presentado públicamente el pasado 9 de mayo.
La encuesta, realizada durante los meses de septiembre y octubre del año pasado, se realizó a 504 personas de la localidad en situación de desempleo, por lo que presenta una fiabilidad del 98% en los resultados (1), tratándose del primer estudio sociológico en profundidad que se realiza en Móstoles referido a los problemas que afrontan estas personas. El estudio también recoge la opinión de este sector de la población con respecto a los programas municipales dirigidos a los parados, su valoración del papel de los sindicatos o la opinión que les merecen grandes proyectos de inversión especulativa, como el frustrado Eurovegas.
El panorama que dibuja este estudio es bien diferente al que se transmite de modo casi triunfalista desde las instituciones, ya que desvela la grave situación que atraviesan un gran número de familias mostoleñas, con un 51% de parados que no perciben ningún tipo de prestación o ayuda, o lo que es lo mismo, 11.123 personas que no tienen ningún ingreso. Ante la magnitud de esta cifra, que el Ayuntamiento de Móstoles publicite como un gran éxito la tramitación de 128 puestos de trabajo a través de su Agencia de Colocación, durante el año 2013 (último año del que existen datos), es poco más que una broma de mal gusto.
También es muy destacable la opinión sobre la actuación del Ayuntamiento de Móstoles en esta materia y la valoración que los desempleados mostoleños hacen de programas como Móstoles + Solidario, desconocido para más del 80% de los encuestados y valorado negativamente por casi un 60% de los que sí lo conocen.
La reducción en más de un 60% de las partidas presupuestarias municipales destinadas a la población más vulnerable amparándose en el nuevo discurso del PP de Móstoles, por el que, en palabras del alcalde Daniel Ortiz, “no tiene la varita mágica ni puede tomar decisiones que impliquen la generación de empleo”, le pasa factura a un equipo de gobierno que hace tan sólo tres años, en plena campaña electoral y en la cresta de la crisis, prometía por boca del entonces alcalde, Esteban Parro, “que el PP creará en los próximos años 20.000 puestos de trabajo en la ciudad a través de iniciativas como el parque empresarial Móstoles Tecnológico, la Plataforma Logística Puerta del Atlántico y la nueva área de suelo productivo Cantamilano, que, en conjunto, suman 4,5 millones de metros cuadrados de suelo productivo”.
Tiempo en Desempleo
El 57% del total de la población desempleada de Móstoles lleva más de un año en situación de desempleo, 8 puntos por encima de la media nacional que se situaba en el 49,3% en el segundo semestre del 2013. Además es destacable que más de la mitad de estas personas no sólo lleva un año en desempleo sino que lleva más de dos.
Tiempo en desempleo por edad
Si observamos por tramos de edad, el porcentaje más alto lo encontramos en la personas desempleadas con edades comprendidas entre 35 y 49 años con un 47%; pero hay que señalar también que, aunque menor, el porcentaje de personas desempleadas con edades entre 16 y 34 años que es de un 32%.
A pesar de las facilidades que se han implementado en los últimos años para que los empresarios realicen contratos laborales y los finiquiten sin coste económico, un altísimo porcentaje de la población de Móstoles (57%) lleva más de un año sin acceder a un solo contrato de trabajo.
Los parados de larga duración, que llevan doce meses como mínimo buscando empleo y no han trabajado en ese período, conforman el grueso de la población desempleada de Móstoles.
La falta de ingresos económicos asociada al paro de larga duración, introduce poco a poco a las personas desempleadas en situaciones de pobreza y exclusión social, por lo que es necesario llevar a cabo políticas de redistribución de la renta que frenen este proceso y limiten el avance de la desigualdad social.
Pero las consecuencias del paro de larga duración no son sólo económicas, sino también psicológicas. Abundantes estudios se han ocupado de las repercusiones psicológicas del desempleo: pérdida de autoestima, sentimientos de inseguridad y de fracaso, experiencia de degradación social, vergüenza o sentimiento de culpa.
Por tanto, el fenómeno del desempleo de larga duración se ha convertido en estos últimos años de consolidación de las políticas neoliberales, en uno de los principales problemas del estado español que afecta no sólo a la estabilidad del mercado de trabajo, sino también al ámbito social.
Los expertos señalan que una de las prioridades en materia laboral debe ser reducir el tiempo de búsqueda de empleo. Cuanto más tiempo esté un trabajador en esta situación, más le costará reinsertarse en el mercado laboral.
Esta circunstancia contradice la creencia generalizada de que la población joven es la más afectada por el desempleo, observándose que de 16 a 34 años sí está afectada por altas tasas de empleo temporal, muy probablemente de baja calidad, ya que la mayor parte de ellos llevan menos de 6 meses en desempleo.
El hecho de que las edades medias sean las más afectadas anima a pensar en las características propias de este grupo de edad, especialmente afectado por cargas hipotecarias y familiares.
Profundizando en la situación de las edades medias descubrimos que un 5,12% de estas personas no están percibiendo ingresos de ningún tipo, ni siquiera ayudas de carácter personal o familiar, un 25,21% se sostienen de un solo salario derivado del salario de un familiar y un 4,70% se sostienen de la prestación por desempleo del propio desempleado.
Este 5,12% significa que 500 familias de este tramo de edad no reciben ningún ingreso y 2.500 familias se sostienen con un único ingreso.
Personas que reciben algún tipo de prestación económica
Como hemos mencionado anteriormente, un 51% de la población desempleada no recibe ningún tipo de prestación, estudiándose a continuación la situación de los que sí reciben prestación económica.
Tipo de prestación que reciben
Observamos que del 49% de desempleados que perciben algún tipo de ingreso, el 56% proceden de la prestación por desempleo, un 30% del subsidio y un 5% de la renta mínima de inserción. Esto podría significar en estos dos últimos casos, que en un breve espacio de tiempo, si estas personas no encontraran empleo, pasarían a formar parte de las personas desempleadas que no perciben ningún tipo de prestación económica, incrementando este porcentaje del 51% al 85%.
Esta situación, planteada de modo hipotético, se puede convertir en una realidad si se considera que actualmente no se crean nuevos puestos de trabajo, ya que los datos que arroja la EPA apuntan a una transformación de empleos fijos en empleos temporales y precarios, fuertemente estacionalizados.
Motivos por los que se ha quedado en desempleo
Un 75% de la población desempleada de Móstoles ha perdido el empleo por despido o extinción de contrato, lo que aporta una instantánea de la facilidad para despedir tras las últimas reformas laborales y la fuerte temporalidad de los nuevos empleos.
Personas desempleadas por familia
La mitad de la población desempleada vive en hogares donde solo él o ella están en esta situación. Cabe la posibilidad de que esta persona viva sola o sea padre o madre de familia monoparental en cuyo caso no encontramos ante una situación más grave.
Sin embargo, resalta especialmente la otra mitad de familias en las que conviven más de dos desempleados. El 19% de las familias de nuestro municipio tienen 3 o más desempleados en la unidad familiar; estas personas se encuentran en una situación extrema de vulnerabilidad social, separadas de la exclusión social por una línea muy delgada que pueden atravesar en cualquier momento si no se implementan medidas sociales destinadas a paliar los efectos más graves del desempleo.
Ingresos familiares en los hogares
Independientemente de si el desempleado percibe o no prestación, en el 66% de los hogares solo entra un ingreso, en el 15% entran dos ingresos y lo más importante es que hay un 16% de hogares en donde no entra ningún ingreso aparte del que pueda percibir el propio desempleado. Dentro de este 16% casi el 50% no está ingresando absolutamente nada, sobreviviendo de ahorros o ayudas familiares. Se trata del sector en situación más delicada de la población desempleada de Móstoles.
En el otro 50% que sí está recibiendo un ingreso por desempleo y teniendo en cuenta la inmovilidad del mercado laboral es fácil presuponer que si no se revierte la situación actual, acabarán engrosando tarde o temprano el bloque de personas que no perciben ingreso alguno.
Dos tercios de la población desempleada viven en hogares donde solo entra un ingreso, si tenemos en cuenta también la alta tasa de temporalidad laboral, el nivel de dependencia de este ingreso afecta de manera muy marcada al núcleo familiar (implica miedo, estrés, etc.) ya que la pérdida del mismo supone la pérdida del único recurso del que disponen, una situación sumamente grave ya que el estudio muestra que el 60% de estas personas viven en viviendas alquiladas sin ayudas oficiales o en viviendas hipotecadas, por lo que la pérdida de ese ingreso conlleva indefectiblemente la pérdida del hogar.
Valoración del esfuerzo del Ayuntamiento en reducir el desempleo en el municipio
El 40% de la población desempleada opina que el esfuerzo municipal es poco, mientras que un 42% opina que el Ayuntamiento de Móstoles no realiza ningún esfuerzo para solventar esta situación.
En relación con estos datos rescatamos unas palabras del alcalde de Móstoles en una entrevista publicada en el periódico “Sur Móstoles” en la que decía: “el Ayuntamiento no tiene la varita mágica ni puede tomar decisiones que impliquen la generación de empleo”. El alcalde con sus palabras elude cualquier responsabilidad, pese a que sí se pueden poner en marcha políticas activas municipales para insertar laboralmente a los desempleados. Hay que subrayar que desde el año 2008 el Ayuntamiento de Móstoles ha recortado en un 60% los fondos municipales destinados a los desempleados, pasando de invertir una media de 395€ por desempleado en el año 2008 a 73 euros por desempleado en el 2014.
Las declaraciones de Daniel Ortiz respecto a su falta de competencias para solventar el problema del desempleo contrasta vivamente con las campañas de propaganda que desde la Corporación municipal se lanzan para hacer creer que el Ayuntamiento trabaja activamente para solucionar el problema, con programas como por ejemplo Móstoles + Solidario, que también ha sido objeto de estudio en esta encuesta, arrojando datos muy reveladores.
¿Conoce el Programa Móstoles + Solidario impulsado por el Ayuntamiento de Móstoles?
El estudio revela que un 83% de las personas desempleadas no han oído hablar de este programa a pesar de intensa campaña publicitaria desarrollada por el equipo de gobierno para darlo a conocer, lo que viene a demostrar que este programa es poco más que publicidad y no sirve para solucionar nada, como se puede ver en la valoración que de él hacen las personas que sí lo conocen.
Al 17% que dice conocer el programa “Móstoles + Solidario” se le preguntó sobre la opinión que le merece y más de la mitad de los encuestados está en desacuerdo o muy en desacuerdo. El programa “Móstoles + Solidario” se basa en una política de subempleo que roza la ilegalidad, jugando con la desesperación de tener algún tipo de ingreso, independientemente de las horas que se trabaje y de lo que se cobre por las mismas.
Políticas de empleo de esta naturaleza ejecutadas por la administración pública constituyen una vulneración de los derechos fundamentales de las personas dada la precariedad absoluta en las condiciones que ofrecen, tanto en temporalidad como en salarios y otros aspectos.
El estudio realizado por RDIIS y la Unión Vecinal Asamblearia de Móstoles (UVA) abarca muchos más aspectos, imposibles de plasmar en un único artículo, por lo que si se desea profundizar más en él, es posible consultarlo íntegro en la página web de UVA Móstoles.