Los tres detenidos en la brutal carga policial ante el restaurante donde comían dirigentes del PP han sido puestos en libertad durante la tarde de hoy, pero una mujer continúa ingresada con pronóstico grave en la décima planta del hospital Clínico Universitario.
Encarna, una mujer cincuentona y luchadora desde el primer momento en Stop Desahucios 15 M Valladolid, sufre una hemiparesia derecha, una disartesia y una hemorragia intraparenquimatosa, de pronóstico grave, según sus familiares. Los allegados del resto de pacientes que se encontraban en la décima planta fueron desalojados tras el ingreso de Encarna.
Una buena parte de los concentrados en la Comisaría de Delicias se dirigió al Clínico, una vez liberados los detenidos durante la indiscriminada carga, para manifestar su apoyo a Encarna. Hasta ocho grilleras policiales llegaron a tomar posiciones en las inmediaciones del centro hospitalario, creando revuelo y alarma.
Una amiga de Encarna informó del estado de la agredida, que por algunos momentos había tenido problemas de expresión y perdido el conocimiento. «Encarna se recupera. Está mejor y con ganas de dejar la habitación para ponerse otra vez en primera línea», se dijo.
Concentración
Durante más de dos horas y media se ha mantenido una concentración ante las puertas de la Comisaría de la calle Gerona en demanda de la puesta en libertad de los tres detenidos en la brutal carga policial realizada por la UIP con base en Valladolid contra un grupo de personas que se manifestaban pacíficamente por la zona de Correos, adyacente a la Plaza Mayor, para protestar por la presencia de «corruptos y fascistas del PP», reunidos en una Convención Nacional durante los tres últimos días en Valladolid.
Los tres detenidos han ido abandonando las dependencias policiales, protegida por miembros de la Unidad Central, entre los aplausos y vítores de los concentrados. Los puestos en libertad, dos de ellos tras haber pasado por el hospital con evidentes muestras de los golpes y lesiones recibidas, han agradecido la solidaridad y expresado sus críticas al salvaje comportamiento de los policías.
«Vergüenza me daría ser policía»; «Vosotros, fascistas sois los terroristas»; «Sin cocaína no sois nada»; «Mercenarios del Capital y de este Régimen»; «Vuestra represión no nos amedrenta»; «Defienden al pepero, golpean obrero»; Perros guardianes del orden y la ley»; «Policía, asesina»… fueron algunos de los gritos coreados.
Varias de las intervenciones registradas durante la concentración recordaron a los policías, la mayoría con la cara tapada y sin número de identificación visible, que «se ha acabado el tiempo. Esto los vais a pagar caro. Y el Gobierno corrupto también. Aquí ya nadie se va a ir de rositas«.
Los vecinos del barrio burgalés de Gamonal desplazados a Valladolid para participar en la manifestación de por la mañana organizada por Parados en Movimiento, también se personaron ante la Comisaría para llamar a la solidaridad. «Y está no será la última», se despidieron entre las muestras de apoyo de los reunidos.
También por la calle Gerona fueron pasado los heridos según eran dados de alta en el Clínico Universitario y en el Río Hortega. Casi todos se dirigieron a los concentrados para relatar las agresiones sufridas y dar las gracias por la solidaridad.
Especialmente relevante fueron las manifestaciones de Jaime, el último en recuperar la libertad, a las 18.30 horas, con un brazo escayolado, un collarín y la parte izquierda de la cara golpeada. «Ha sido una represión brutal», acertó a decir.
Minutos antes, Juan había manifestado las amenazas recibidas por la policía: «Enano terrorista te vas a enterar». Y bien que se enteró a tenor de las muestras de los golpes por todo el cuerpo, incluida la cara. Fátima coincidió en manifestar que se trataba de una protesta pacífica que estaba llamando ladrones al PP. «Mientras ellos comían, nos macharon», comentó. Jorge dijo: «Los de los sobres se estaban dando una comilona a nuestra costa cuando hemos sido salvajemete agredidos». Clara, con una bolsa de hielo en el ojo izquierdo, fue otra de las golpeadas con «trauma cerebral leve». Montse, con un brazo vendado y el labio inferior partido, dijo «sentir más impotencia que dolor», aunque tiene para más de un mes de baja y un período de rehabilitación…
Concentración y asamblea
A las puertas de la Comisaría de Delicias se han convocado para mañana lunes, a las 19 horas, una concentración de repulsa en la plaza Fuente Dorada y una hora después, en el Ateneo Republicano, una asamblea para analizar lo sucedido y pedir responsabilidades políticas.
«Desde luego se pedirá la dimisión del delegado del Gobierno y la retirada de la cocaína a los policías«, se anticipó.
También se prepararan las denuncias. Los abogados hoy personados en la comisaría manifestaron su sorpresa por no haberse facilitado, de momento, atestado alguno. «Se ve que tenían prisa por soltar a todos», opinaron.