Miles de personas en las calles de Alcorcón contra externalización y despidos. Fuerte represión

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l [Fotos] Los incidentes han acabado con al menos 15 detenidos. Ante la resistencia popular, los antidisturbios se han visto obligados a pedir refuerzos a Madrid

Unas ocho mil personas, entre vecinos, trabajadores de la empresa pública de Servicios Municipales ESMASA y del Ayuntamiento de Alcorcón y solidarios de toda la comunidad de Madrid, se han manifestado este sábado por las calles de la localidad para denunciar los recortes de personal incluidos en el Presupuesto 2014 y para mostrar su rechazo a la externalización del servicio de retirada de vidrio.

Durante el recorrido de la protesta se ha podido leer en la pancarta de la cabecera «La defensa de lo público. Ni privatización en Esmasa ni despidos en el Ayuntamiento». Entre las frases más repetidas, los participantes han coreado «Hoy la basura está en Valladolid», en referencia a la presencia del alcalde, David Pérez, en la convención nacional del PP; «David Pérez, nadie te quiere» o «Alcalde, escucha, el pueblo está en la lucha».

La manifestación se inició a las 18 horas y ha recorrido la Avenida Alcalde José Aranda, la calle de los Cantos y la calle Mayor terminando en la Plaza del Ayuntamiento de Alcorcón, mientras se oían lemas como «que no, que no, que no, que no queremos ningún despido ni la privatización», «hoy la basura no se recoge y mañana tampoco» o «vecino despierta el paro está en tú puerta».

La manifestación se había desarrollado de forma pacífica hasta llegar sobre las nueve la noche a la plaza de España, frente al ayuntamiento, donde los antidisturbios, con malos modos, impidieron el paso a los manifestantes. En respuesta a esa actitud, la gente comenzó a lanzar basura frente a los agentes, que inmediatamente cargaron con inusitada violencia.

Para evitar la represión, los manifestantes lanzaron piedras y palos y corrieron por diversas calles del centro, incendiando montones de basura y contenedores y causando destrozos en oficinas bancarias, para distraer a los policías. Los represores perseguían a los manifestantes, quienes tuvieron que destrozar el mobiliario urbano para usarlo como barricada y así impedir el paso de las lecheras. El centro del municipio madrileño se vio convertido en una auténtica batalla campal. Ante la resistencia popular, tras más de tres horas de lucha, los antidisturbios se han visto obligados a pedir refuerzos a la capital.

La represión vandálica se ha saldado con al menos 15 detenidos –tres mujeres adultas, dos menores y diez jóvenes– y al menos 14 heridos. Todos ellos han sido asistidos en hospitales cercanos al municipio.

«NO A LOS RECORTES»

Lo que se busca es la precarización laboral y la privatización de los servicios públicos, motivo por el que hoy se hacía una manifestación conjunta, dijeron algunos manifestantes. Piden que el Gobierno local cumpla el convenio que recoge la no externalización de ningún servicio prestado por la empresa pública.

«Lo único que pedimos es que se cumpla lo firmado, que es seguir recogiendo vidrio, cartón y residuos sólidos. El convenio nos supuso a los trabajadores una bajada de sueldo del 17 por ciento, que si se hizo efectiva. Ahora, él [alcalde] quiere incumplir, nos quiere privatizar el vidrio y no estamos dispuestos», ha señalado el presidente del comité de empresa.

Además, ha recordado que contratar a la empresa Tragsa para limpiar las calles del municipio es una «vulneración de los derechos fundamentales». En los mismos términos se han expresado desde las Secciones Sindicales del Ayuntamiento de Alcorcón, que exigen la reincorporación de los diecinueve trabajadores despedidos el pasado lunes y la paralización de los recortes.

También, algunos trabajadores de la fábrica de Coca-Cola en Fuenlabrada se han sumado a la manifestación porque, según dicen, hay que estar unidos contra los recortes. «Lo hacemos porque a cualquier obrero que, en este país, se le prive de trabajo le está amputando las manos», ha señalado Pedro Muñoz, uno de los afectados por el cierre que planea la empresa.

Desde los sindicatos de la huelga de basuras y de las secciones sindicales del Ayuntamiento ya han anunciado que ellos también estarán en todas las acciones que lleven a cabo los trabajadores de Coca-cola, «porque hay que estar unidos en estos momentos».

Ya hay convocadas próximas concentraciones, todos los martes y viernes a las 11 horas a las puertas del Consistorio y el 23 de febrero volverán a realizar una manifestación conjunta.

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