El líder de la oposición ucraniana, Vitali Klitschko, se pronunció este miércoles en nombre de decenas de miles de manifestantes congregados en la emblemática plaza de la Independencia de Kiev (capital) y lanzó un “ultimátum” al Gobierno del presidente Viktor Yanukovich, a quien dieron “un plazo de 24 horas para hacer concesiones”.
“Si Yanukovich no hace concesiones mañana (jueves), pasaremos a la ofensiva (…) Si tengo que ir bajo las balas, iré ahí bajo las balas”, amenazó Klitschko, tras salir de un encuentro con el propio Mandatario que concluyó sin buenos resultados.
Desde la plaza de Kiev, Klitschko señaló que la dirigencia opositora tomó la decisión, debido a que el Mandatario no anunció respuestas claras a sus demandas durante la citada reunión.
Asimismo, advirtió sobre una inminente intensificación de la represión policial, cuyo objetivo sería “acabar con las protestas pro Unión Europea (UE)”, para después instar a los opositores a “hacer todo lo posible” para impedir el desalojamiento.
Al menos cinco manifestantes opositores murieron y unos 300 resultaron heridos este miércoles, al enfrentarse con las fuerzas de seguridad. Las autoridades agregaron que fueron detenidos 50 ciudadanos.
Medios locales reportan que ambulancias trasladaban con urgencia a los heridos para que recibieran atención médica. Por ello, no se descarta que el número de fallecidos aumente.
Una fuente del servicio médico improvisado de la oposición declaró a la agencia AFP que uno de los manifestantes fue “probablemente asesinado por un francotirador”.
“Cuatro heridas por disparos en la cabeza y en el cuello en uno de los muertos no es legítima defensa sino disparos deliberados contra ciudadanos pacíficos”, declararon líderes de la oposición en un comunicado.
Por primera vez desde que empezaron las manifestaciones contra el Gobierno, en noviembre de 2013, las fuerzas del orden emplearon tanques para avanzar entre las barricadas alzadas por los manifestantes.
Este jueves, manifestantes y policías se enfrentan en un tenso cara a cara en Kiev, separados por una barricada de neumáticos en llamas en el mismo emplazamiento donde una serie de choques violentos dejó los cinco muertos.
La violencia ha dejado cientos de heridos desde noviembre pasado, cuando se generaron los primeros focos contra la decisión del Gobierno de no firmar un acuerdo de asociación con la Unión Europea y elegir un acercamiento a Rusia.
Las protestas se agravaron esta semana, tras la entrada en vigor de un conjunto de leyes que coarta la libertad de reunión, prohíbe la instalación de tiendas, altavoces y escenarios en lugares públicos, permite la detención de manifestantes ataviados con cascos o máscaras y endurece las penas contra ellos.