
La respuesta al anuncio hoy del alcalde Burgos, el “popular” Javier Lacalle, de paralizar el proyecto de construcción del bulevar en Gamonal “15 o 20 días” se la ha encontrado hoy en la calle: la mayor manifestación de vecinos desde que estalló el conflicto.
Un día más, miles de burgaleses han vuelto a manifestarse como si nada nuevo hubiera ocurrido, como si el alcalde de Burgos no hubiera anunciado que durante ese plazo abriría un diálogo, ahora sí, “con los vecinos afectados” del barrio de Gamonal.
Para los representantes de los vecinos de Gamonal, que hoy han participado en Valladolid en un debate invitados por el Ateneo Republicano, el anuncio del regidor burgalés “no sabemos si es una pantomima o una salida medio digna” al conflicto.
Manifestantes contra el bulevar después del anuncio de Javier Lacalle de paralizar las obras Foto: Burgosdijital
La excusa del regidor municipal de no poder continuar las obras porque “no se garantiza la seguridad de personas y empresas”, se contradice con el rumor que ha circulado en las últimas horas que hablaba de la existencia de presiones del PP desde Génova para que Lacalle tomara la decisión que hoy ha anunciado de prisa y corriendo.
A pesar de haber negado la existencia de tales presiones, lo que ahora pretende con este anuncio, ha dicho, es “volver a la normalidad y alcanzar “un consenso” lo más amplio posible entorno a la reforma de la calle Vitoria.
Manifestación
Y de nuevo la calle como protagonista, pero esta vez duplicando manifestantes. Casi en la misma proporción que hoy ha aumentado el número de policías que se han apostado en todas las salidas del recorrido habitual de la manifestación: una “visita” al Edificio Promecal, sede del grupo multimedia del que es propietario el constructor Méndez Pozo, y a la Comisaría de Policía para solicitar la libertad de los detenidos.
Al regreso, y ya en la “zona cero”, la presión de los manifestantes, al grito de “sin cocaína no sois nada”, ha obligado a la policía a replegarse, sin que se produjera ningún incidente.
Manifestación hoy por las calles de Burgos: Foto. Álvaro Alonso
Las movilizaciones van a continuar, aunque después del anuncio del alcalde se ha suspendido la concentración de las 6 de la mañana, que hasta ahora “vigilaba” el posible inicio de las obras. Se mantienen las asambleas de las 12 del medio día y de las 7 de la tarde, así como la posterior manifestación.
¿Qué está pasando en Gamonal?
Laura Fraile. Valladolid
Ésta es la pregunta que llevaba este martes por la tarde a que tres vecinos de este barrio acudieran a Valladolid para compartir ante un Ateneo repleto de gente las luchas históricas que han acompañado a este barrio de 70.000 habitantes.
La charla comenzaba a las 20 horas de la tarde en la sede del Ateneo (c/ Piedad 1-3) con un cántico que fue secundado por todos los asistentes: «El pueblo unido jamás será vencido». Lema, por cierto, muy acorde con una situación que en los últimos días ha saltado a la primera página de los principales medios de comunicación del país y que ha convertido a este barrio en un referente para mucha gente.
Dentro de esta charla, la primera persona en intervenir fue Rafael Lacalle, quien realizó un recorrido por las principales luchas vividas en el barrio durante los últimos años, aunque partiendo de una descripción del Gamonal. «Gamonal era un pueblo independiente que en los años 50 vivió un desarrollo industrial. Fue entonces cuando Burgos decidió anexionárselo, realizando para ello una negociación ficticia con un pueblo humilde que se vendió a la ciudad a cambio de una línea de autobús y unas fiestas para el barrio«, comenzaba diciendo este vecino.
Gamonal fue creciendo a base de la construcción de viviendas para obreros, lo que derivó en una población mayoritariamente de este tipo que iría creciendo con la llegada de población gitana e inmigrante. «Eran años de militancia ante el franquismo que también vivieron la eclosión de los movimientos vecinales, de los ateneos culturales y de los movimientos sociales del barrio. Por aquel entonces, y aún ahora, se sigue diciendo `me bajo a Burgos´ cuando la gente se dirige hacia el centro«, añadía Rafael más tarde.
Durante su intervención, este vecino repasó algunos de los principales conflictos vividos en esos años. «A finales de los 70 subió el precio del autobús urbano y la gente se organizó y cortó el tráfico. Después, a principios de los 80, cuando José Mª Peña estaba como alcalde, se exigió a los vecinos que pagaran las aceras, y muchos vecinos fueron al Ayuntamiento, donde rompieron las facturas. Más adelante querían construir un edificio en una parcela vacía del barrio, y los vecinos consiguieron retirar la maquinaria y que no se construyera. Otra de las luchas vividas en el barrio se produjo por la subida del IPC, que generó una huelga del pequeño comercio que fue secundada por alrededor de 5.000 personas. También ha habido una gran lucha por la construcción de un sexto instituto, así como luchas por el nuevo hospital», resumía Rafael.
Rafael Lacalle y Alberto San Martín en el Ateneo Republicano de Valladolid. Foto: Gaspar Francés
En este recorrido por el barrio, éste destacó la presencia de un fuerte movimiento por la objeción de conciencia, la existencia del centro social Gacela así como de escuelas populares de música, a lo que se sumaría el trabajo de un grupo de jóvenes que actualmente trabajan en el asesoramiento de las familias gitanas y de personas inmigrantes.
«La primera batalla de Gamonal fue contra Napoleón y la segunda fue contra la policía. Todo esto fue en el año 2005, a raíz de la construcción de un parking que tuvo los mismos actores que el conflicto que ha estallado ahora. La gente se mostró en contra de este proyecto de una forma convencional, a base de la asistencia a Plenos, a través de la recogida de firmas y mediante manifestaciones, porque el proyecto supondría la eliminación de plazas de aparcamiento en superficie de carácter gratuito y la privatización de las plazas bajo terreno, dando forma a un proyecto especulativo que al final no se llegó a construir», explicaba más tarde Rafael, aludiendo a otro de los conflictos recientes vividos en el barrio.
Según comentó, en el conflicto de los últimos días han influido varios factores, aunque el principal es la presencia de un proyecto innecesario diseñado por Antonio Miguel Méndez Pozo, al que presentaba con estas palabras: «Es un empresario condenado a nueve años de prisión por corrupción que antes de ser juzgado compró el Diario de Burgos, un medio que utilizó como una herramienta de presión. Tras el cierre de Diario 16, éste se convirtió en el único medio de comunicación escrita. Tras haber estado año y medio en la cárcel, Méndez Pozo se convirtió en el presidente de la Cámara de Comercio de Burgos«.
«El conflicto nace cuando se dice lo que éste va a hacer en Gamonal, que es una nueva cacicada de Méndez Pozo, redactor del proyecto. Esto se lleva a cabo en medio de un PP corrompido que se ha negado a escuchar a las asociaciones vecinales que no estaban de acuerdo con el proyecto. Era evidente que el conflicto iba a ocurrir… Por el camino a Valladolid nos hemos enterado de que las obras se han paralizado temporalmente y que van a crear un Consejo con los partidos políticos y las asociaciones. No sabemos muy bien si es una pantomima o una salida medio digna antes de claudicar ante los bárbaros del Gamonal», apuntaba Rafael al final de su intervención.
A continuación tomó el turno de palabra Alberto San Martín, otro de los vecinos de este barrio, quien explicó la situación de Gamonal. «En parte es un conflicto entre el centro y la periferia. Los vecinos han sido menospreciados por unas exigencias históricas lanzadas ante el Ayuntamiento que éste nunca ha escuchado. Por ejemplo, está el caso de los tendidos de alta tensión sin soterrar, que producen unas graves ondas electromagnéticas y que hacen más grave la situación ya que se encuentran junto a un colegio de Primaria. Cada vez que llueve se inunda el parque de Santiago, se cerró una guardería de un barrio aledaño al que iban muchos niños de Gamonal por la falta de 14.000 euros, el centro cívico cuenta con una política de subcontratación que ha aumentado el precio de sus cursos, hay zonas que aún están sin urbanizar y sin alumbrado…», explicaba éste.
Tomando este punto de partida, el planteamiento de un macroproyecto para la construcción de un boulevard valorado en 20 millones de euros, que reduciría los cuatro carriles existentes a dos, anulando con ello el espacio destinado a aparcamientos gratuitos y poniendo en su lugar plazas privatizadas al precio de 20.000 euros con una cesión a 40 años, ha generado un grave conflicto, que es el mismo al que hemos podido asistir durante estos últimos días. «La respuesta del Ayuntamiento ha sido militarizar al barrio con policías, actuando con una estrategia caracterizada por aumentar las detenciones para amedrentar a la gente. Esta estrategia, hasta ahora, ha dado lugar a 46 detenidos, dos de ellos en prisión preventiva. La respuesta de la gente se ha visto en manifestaciones como la de ayer, que reunió a alrededor de 5.000 personas, y en unas asambleas que se han ido haciendo en la Casa de Cultura (antes de que el Ayuntamiento cortara la luz), en la iglesia y en la calle», añadía más tarde Alberto.
«Llevamos dos meses reuniéndonos, haciendo manifestaciones y eventos contra la construcción del boulevard, pero nada de esto había salido en la prensa hasta ahora», explicaba Álvaro, otro de los participantes de la charla, reflejando con ello una invisibilización y una manipulación informativa que, según afirmaba, se ha suplido gracias a medios como el Diario de Vurgos o Burgos Dijital, carencia que antes también fue cubierta por documentales como `¿De quién es la calle?´ o `Gamonal (es)´.
«En el barrio se ha fijado un toque de queda arbitrario, ha habido secretas que se han hecho pasar por vecinos y se ha criminalizado a la gente. Se ha hablado de grupos organizados, pero era la chavalería del barrio. También se ha dicho que se habían dañado los pequeños comercios, pero lo que se ha dañado ha sido a las sucursales bancarias. En estos días se ha llorado de rabia, no de miedo. También queremos remarcar el carácter de esta oposición, que se ha vivido desde un enfoque de democracia directa y representativa. También se ha sumado una huelga estudiantil, la gente de las casas está bajando café, galletas y chocolate, las ventanas se han llenado de mensajes de apoyo…«, resumían estos tres vecinos, que concluían su intervención con el recordatorio de la concentración prevista para este miércoles a las 20 horas en Fuente Dorada.
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