El ministro de Interior, Jorge Fernández, ha explicado que el Gobierno españo pretende aprobar la reforma del Código Penal en el Consejo de Ministros antes del verano y terminar su tramitación parlamentaria antes de fin de año.
Los trabajos, según ha reconocido, se han acelerado tras los incidentes ocurridos el pasado jueves en Barcelona durante la jornada de huelga general. En la reforma trabajan «conjuntamente» los ministerios de Interior y Justicia para dar «una respuesta adecuada a la altura de la agresión que se está formulando a la sociedad».
«En Barcelona se ha puesto de manifiesto que hay radicales y violentos que usan esos eventos para actuar como auténticas guerrillas urbanas y, junto a Justicia, preparamos una respuesta del Código Penal adecuada a la agresión a la sociedad que se produce», ha afirmado.
Así, ha indicado que «elevando las penas para ese tipo de agresiones y para ese tipo de delitos a un mínimo de dos años, los fiscales en su caso podrán pedir como medida cautelar la prisión provisional y los jueces en su caso adoptarla».
Gara: Interior plantea endurecer las penas por delitos de violencia callejera