INTERVENCIÓN en el homenaje a María Pacheco. Oporto, 28 de marzo de 2015.
En primer lugar, queremos agradecer al Pueblo trabajador Portugués en general y al de Oporto en particular, también a sus instituciones, que hayan acogido la celebración de este primer acto comunero de homenaje a María de Pacheco, enterrada en el altar de San Jerónimo de la Catedral de esta hermosa ciudad, atravesada por el mismo río, Douro o Duero, que atraviesa tantas ciudades y villas castellanas.
Queremos agradecer también al Pueblo portugués la acogida en su exilio a la llamada Leona de Castilla, desde febrero de 1522 hasta marzo de 1531 en que fallece. Ella fue una auténtica lideresa comunera en la resistencia de Toledo ante el asedio de la ciudad por las tropas imperiales de Carlos V.
María de Pacheco es condenada a muerte en rebeldía en 1524, curiosamente el año del nacimiento de Luís de Camões, el gran literato portugués autor de Os Lusiadas. Carlos V la excluye del Perdón General del 1 de octubre de 1522, junto a otros 287 comuneros y comuneras. Realmente el nombre de Perdón General era puramente propagandístico, porque una buena parte de los líderes comuneros ya habían sido ejecutados, como era el caso de Juan Padilla, esposo de María de Pacheco, o el de Bravo y Maldonado, degollados el 24 de abril en Villalar justo al día siguiente de la batalla del mismo nombre; en el mejor de los casos, estaban en el exilio en Portugal o en América.
Juan III, Rey de Portugal, no respondió nunca a las peticiones de extradición que Carlos V le hizo sobre María de Pacheco. Esta a su vez nunca pidió perdón al emperador, porque siempre consideró justa y legítima la lucha comunera y su papel en ella.
Queremos recordar al obispo de la época de Oporto, Pedro Acosta, que ayudó de forma muy importante a la supervivencia material de nuestra jefa comunera.
María de Pacheco era una mujer de gran cultura: dominaba el latín, el griego y las matemáticas, cosa no muy usual en las mujeres de la época. Ademas era una mujer de gran capacidad de organización, decisión y resolución como demostró en su papel de dirigente de la resistencia comunera de Toledo entre 1521 y 1522, a pesar de la derrota de Villalar y la ejecución de su marido, Juan de Padilla, que le provocó un gran choque emocional.
Hoy estamos aquí para celebrar este primer homenaje público en su lugar de exilio y enterramiento. El Homenaje a Maria de Pacheco se halla en el camino de levantar el silencio que pesa sobre tantas y tantas mujeres heroicas que valientemente han participado en luchas populares y revoluciones que la historia olvida.
Pero también para impulsar la recuperación de su memoria histórica, porque además de la transcendencia que ella tiene para Castilla, tiene también importancia como ejemplo de solidaridad entre Portugal y Castilla.
La relación histórica entre Castilla y Portugal es compleja. Esta no siempre ha sido coherente con la geografía. Tres grandes ríos fluyen por nuestros respectivos territorios en un único cauce y con un único caudal, el Duero-Douro; el Tajo-Tejo y el-la Guadiana a los que Camões dedicó los siguientes versos en Os Lusiadas:
– Canto VII, estrofa 70º: Do rico Tejo e fresca Guadiana.
– Canto VIII, estrofa 3º: Do Duoro, Guadiana o Campo ufano
Ríos que son esenciales en las respectiva configuración de nuestros pueblos: sus villas, sus ciudades, su agricultura, su industria…
Portugal y Castilla tuvieron muy estrechas relaciones a lo largo de la historia, también confrontaciones.
La guerra por la sucesión de Enrique IV de Castilla entre los partidarios de su legítima hija Juana, llamada “La Beltraneja” por los que quisieron debilitar su posición, apoyada por Portugal, e Isabel, hermanastra de Enrique IV, matrimoniada con Fernando de Aragón y que finalmente se saldó con la victoria de ésta, bascula hacia el mediterráneo los intereses de esa alianza matrimonial.
La historia no se puede cambiar, pero el futuro lo estamos construyendo cada día y es bueno que tengamos muy en cuenta los errores de aquella para no repertirlos.
Hemos elegido esta plaza para celebrar este homenaje porque en ella hay un monumento de recuerdo a Humberto Delgado, general portugués, que de apoyar inicialmente el régimen de Salazar pasó a ser la principal referencia de la oposición a él y de alguna manera fue el precursor del movimiento de las fuerzas armadas que cristalizó en la revolución de abril de 1974.
Precisamente en esta misma plaza, el 14 de mayo de 1958 tuvo una acogida multitudinaria después de declarar en una entrevista radiofónica que “si ganaba las elecciones presidenciales frente al candidato oficialista, Américo Tomás, despediría a Marcelo Caetano”. Estas elecciones son amañadas, pero en 1962 impulsa un movimiento militar democrático que aunque no triunfa en ese momento siembra la semilla, como decía, del triunfo del movimiento de abril de 1974.
El 13 de febrero de 1965 es detenido y asesinado por la PIDE en la frontera española por Extremadura, junto a su secretaria Arajarir Moreira Campos.. En esa operación criminal colabora la Brigada Político Social española y la CIA. A estas personas también queremos rendirles un homenaje hoy.
La revolución comunera, en palabras de Carlos Marx, fue la primera revolución seria de Europa. Durante muchos meses, a pesar de estar en lucha abierta con las tropas imperiales, se organizó el Poder Popular en muchas villas y ciudades castellanas: herreros, carpinteros, clérigos, trabajadores y trabajadoras del campo y de la ciudad, tomaban las decisiones sobre las cuestiones comunes en asambleas abiertas en base al argumento principal del bien de la mayoría.
El Pueblo castellano sabe que cuando se perdió la guerra comunera, Castilla perdió sus libertades, su soberanía y sus bases económicas. Cada 23 de abril en las campas de Villalar se recuerda, cada vez con mayor esperanza en el futuro, la revolución comunera.
Castilla ya no espera, Castilla construye muy activamente su nuevo movimiento comunero del siglo XXI. El ejemplo de María de Pacheco y de otros muchos y muchas como Humberto Delgado nos estimula para recorrer ese camino.
VIVA EL PUEBLO PORTUGUÉS
VIVA CASTILLA LIBRE Y COMUNERA
VIVA LA SOLIDARIDAD ENTRE LOS PUEBLOS
