Agencias/Prensa/Kaosenlared
Según han informado fuentes municipales, los hechos ocurrieron sobre las 14’45 horas en las cercanías de la plaza de Lavapiés, cuando dos agentes de la Policía Municipal de Madrid, que iban de paisano, han detenido a un hombre que estaba haciendo venta ambulante en la calle.
Durante la detención, varias personas que había en la zona han criticado la actuación policial y han increpado a los policías. En un momento dado, uno de los agentes ha desenfundado su arma y ha efectuado dos disparos al aire para intimidar. Mientras, su compañero agredía a otro ciudadano que trataba de impedir la detención de su compañero.
Los policías han pedido refuerzos y al lugar se han desplazado varias dotaciones de la Policía Nacional. El colaborador de Kaos, Jorge Moruno -residente en el barrio-, relataba así, a través de su cuenta de Facebook, lo sucedido a partir de ese momento:
«Resuenan sirenas y gritos en mi calle, me asomo a la ventana y veo coches y furgonas de policía paradas en la plaza de Cabestreros. Mi vecino de al lado, me dice ¿sacamos las cacerolas? se hace ruido, me bajo y ya hay más de 50 o 60 personas dejando claro a la policía, que no queremos redadas en nuestros barrios; frente a la gente, varios antidisturbios de la municipal ataviados con cascos, escudos y porras. Se dice que antes, han disparado dos tiros al aire, hay 4 detenidos y un herido por descarga eléctrica. Ha venido un cónsul de Senegal para lidiar con los maderos. Ellos se han ido, aquí no se les quiere, son ajenos a la comunidad, defienden a ricos persiguiendo pobres».
Desde luego, una versión mucho más creíble que la dada tanto por la policía municipal como por la policía nacional antes de que supiesen que había un vídeo circulando por internet. La Policía Muncipal habló en su primera versión de un solo disparo al aire, algo que posteriormente han tenido que rectificar una vez se ha hecho público el documento gráfico, en el cual se observa claramente como el agente realiza dos disparos, además de apuntar en un determinado momento con su arma a la cabeza de la persona que les estaba increpando.
Pero la más surrealista de todas es la versión dada por la policía nacional. Según publica El País, los nacionales habían asegurado lo siguiente: «Los agentes detectaron a un vendedor de bolsos falsificados que huyó por la calle del Amparo. En su persecución, los agentes toparon con una asamblea vecinal vinculada al 15-M, algunos de cuyos miembros agredieron a los agentes al creer que estaban evitando una detención por motivos racistas (para identificar a un presunto inmigrante irregular)«. ¿Qué les parece?
Estos son los mismos cuyos testimonios son luego prueba de veracidad en los juicios y en los procesos administrativos que se abren contra ciudadanos y ciudadanas, a los que, por ejemplo, se les acusa de atentado contra la autoridad, o de tantas cosas más que ustedes ya conocen. Seguramente, de no estar este vídeo, a la persona detenida la acusarían, si quisieran, de algo similar, y un juez les daría la razón porque ellos tienen presunción de veracidad. En cambio, una vez más, como tantas veces, se demuestra que la policía miente y da la versión que le parece más conveniente, criminalizando y acusando en falso a quien creen oportuno. Pero así es la justicia en este estado.
Otro clásico, por supuesto, es el de decir que los agentes han resultados heridos. En este caso, parece ser que, según la Policía Municipal, tiene una lesión en un ojo y el otro en una rodilla. No se lo cree nadie, pero bueno, ahí queda, para que se publique en todos los medios, y aparezcan encima como víctimas.
Tras ver el vídeo, la Concejalía de Seguridad y Medio Ambiente ha mantenido su apoyo a la actuación de los agentes. No obstante, abrirán una investigación «como siempre que se utiliza un arma», recalcan fuentes de ese departamento. Para qué van a decir otra cosa. Y los investigadores, por supuesto, serán muy independientes e imparciales, claro, como creíble es el testimonio de la policía nacional, tal cual se ha visto más arriba.
No es la primera vez que las redadas de inmigrantes terminan con incidentes en el barrio de Lavapiés, como ocurrió en julio de 2011, cuando varias decenas de personas increparon a la Policía cuando varios agentes intentaban llevarse preso a un ciudadano extranjero a una comisaría. Pero esta vez ha acabado con los policías ejerciendo de pistoleros, en un aviso de lo que se está cociendo en este estado desde los cuerpos y fuerzas de seguridad, por si no había quedado ya lo suficientemente claro.
Publicado en Kaos en la Red: Madrid: Un policía abre fuego durante la detención de un inmigrante