Por asombroso que parezca, sigue habiendo seres que consideran perfectamente “compaginable” el hecho de indignarse por una violación y el de aceptar la prostitución.
Esas personas o tienen el razonamiento lógico estropeado (vale, no seré agresiva y diré que lo tienen “entumecido”) o se creen que somos nosotras quienes carecemos de la consistencia mental necesaria para detectar su artimaña. Hablando en plata: o son obtusas o nos consideran a nosotras tontas de remate e intentan hacernos comulgar con ruedas de molino.
Porque, veamos:
1. Los pro-legalización sostienen que ser prostituta es un trabajo como otro cualquiera. “Trabajo sexual”, lo llaman. Pagar por acceder sexualmente al cuerpo de una persona que no te desea es como pagar por comprar judías verdes, por ejemplo. Entonces, cuando violan a una prostituta le han robado algo con un precio material y monetario cuantificable. ¿Cuánto cobra esa mujer? ¿20€? (probablemente, descontando lo que tiene que pagar al proxeneta, serán unos 10). Luego, según la lógica de los partidarios de la normalización del “trabajo sexual”, violar a una prostituta es como robar a un taxista bajándose de su taxi sin pagar la carrera. ¿Y piden 10 años de cárcel por eso?
2. Caso de violar a una mujer no prostituida, le roban algo que ella no tiene en venta. Pero, lo tenga en venta o no, lo que le roban es algo con valor comercial. Vamos, es como si le roban el móvil. Ella no desea venderlo, claro que no, alguien se lo quita. Si atrapan al ladrón le impondrán una pena, por supuesto, pero proporcional a lo robado. En el mercado, los móviles (cualquier móvil) cuesta mucho más que la inmensa mayoría de los cuerpos de las mujeres. ¿Móviles por 30€? Más bien por 300 (o incluso 800€) ¿Prostitutas por 30€? Todas las que se quiera. Incluso por la mitad (las de 300€ son escasísismas y más bien pertenecen a la fantasía cinematográfica…). Entonces ¿tendremos que reclamar penas proporcionales, no? Si por una violación pedimos 10 años de cárcel, por el robo de un coche (sin violencia y sin que lo destrocen) tendremos que pedir cadena perpetua…
Resumen y conclusión: Se puede ser persona cínica, desvergonzada, incongruente, pero hay excesos que dan infinito asco. Si eres de los que consideran que el cuerpo (y concretamente el de las mujeres) es objeto de transacción comercial, violar a una prostituta y es como bajarse de un taxi sin pagar. Ambos “robos» son delito y deberán ser castigados, sí. Pero, claro, a su justo valor. No vamos a pedir una pena de 10 años por una carrera de 15€ ¿no? Eso, en el caso de una mujer prostituida.
Si no lo es, violarla sería como robar un coche para darse una vuelta con él. Es más, sabemos que el cuerpo femenino vale mucho menos que un automóvil ¿cómo vamos a pedir un castigo mayor para el primer delito? Si pedimos diez años por una violación, tendremos que pedir cadena perpetua por el robo de un coche porque este tiene un valor mercantil muchísimo más alto.
De modo que si en las manifestaciones contra la sentencia de la violación de Manresa vemos a alguien de los “guays-modernos-progres-liberales” gritando indignados, tendremos que preguntarles si piensan pedir la guillotina para quien les robe su Samsung Galaxy S8 (cuesta 1000€).
O sea, quienes son pro-prostitución y sostienen que una violación tampoco es para tanto, tienen su lógica. Son repugnantes pero coherentes. Los pro-prostitución que se dicen escandalizados por las violaciones lo que no tienen es vergüenza ni dos dedos de frente.