Intervención de IzCa leída en el acto de apoyo a José Sarrión y la candidatura Castilla y León en Marcha

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Buenas tardes a la Valladolid rebelde, a la Valladolid que no se doblega.

Agradecemos la invitación a participar en este acto de apoyo a la candidatura Castilla y León en Marcha, candidatura para la que desde nuestra organización, Izquierda Castellana, pedimos respaldo en las urnas el próximo 26 de mayo.

Nuestro apoyo a la candidatura encabezada por José Sarrión tiene que ver, en lo fundamental, con dos ideas-fuerza:

  • La primera es una evidencia empírica; para nosotros es un hecho probado que José Sarrión ha sido un terminal del movimiento popular en las Cortes de Castilla y León. Así lo sabemos quienes hemos formado parte de los movimientos en defensa de lo público, de los conflictos laborales o de los movimientos en defensa de la tierra y del medio rural. Sarrión es un activista que, metido a parlamentario, ha llevado la voz de la calle a las instituciones de manera sistemática y generosa.

  • La segunda idea-fuerza descansa sobre esa experiencia: es la expectativa en que, de lograrse su reelección, así seguirá siendo durante la próxima legislatura y cada rincón de esta autonomía seguirá contando con un altavoz para elevar sus reivindicaciones.

Ahora que se ha cumplido el octavo aniversario del 15M, debemos recordar que a cada pie que se pone en las moquetas de las instituciones, mil deben permanecer en el suelo de los barrios, de las plazas y de los pueblos, en el sindicalismo, en las asociaciones vecinales, en las plataformas en defensa de la sanidad, pensiones y educación públicas, en el movimiento feminista, en las luchas contra el narcotráfico, la especulación, los desahucios o las casas de apuestas, en las plataformas antifascistas, en las asambleas juveniles, en los centros sociales. Hoy estamos aquí apoyando esta plataforma electoral para el 26 de mayo, pero tod@s sabemos que la mejor candidatura posible es la del compromiso con la organización permanente del movimiento popular, del activismo y la militancia.

Es siempre un buen momento para reivindicar que la izquierda transformadora no puede estar para gestionar de manera más eficiente, transparente y ética las miserias del capital, ni tampoco las instituciones del Régimen del 78. Todo eso, pese a las dificultades, debe ser trascendido. Que nunca se nos olvide que la tarea principal debe ser la de sustituir al Régimen mediante un proceso constituyente republicano que dé solución a los problemas de las clases populares y de las mujeres y hombres de Castilla y del conjunto de pueblos del Estado español. Revolución, compañeras y compañeros, no es ni más ni menos que cambiar todo lo que deba ser cambiado. Y trabajo, en ese sentido, no nos falta.

Por ir acabando, algo que podemos ofreceros es la certeza de que seremos muy exigentes con vosotros. Puede no sonar de gran ayuda, pero desde luego lo es. Debe entenderse la exigencia, la crítica honesta y sincera (la autocrítica), no como una deslealtad, sino como una cualidad muy necesaria para el avance de todo proyecto.

En Castilla, en este pueblo que es políticamente periférico pese a su centralidad geográfica, tenemos un precioso dicho comunero que Sarrión bien conoce: “comunes el sol y el viento, común ha de ser la tierra, que vuelva común al pueblo lo que del pueblo saliera”.

Adelante la construcción de la Unidad Popular.

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