Juan Carlos I sufrió un ataque de ansiedad al conocerse las cintas de Corinna

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Juan Carlos I (80 años) ha sufrido un ataque de ansiedad tras la publicación de las reveladoras cintas de Corinna por parte del diario EL ESPAÑOL. El aforamiento del emérito no le protege de los achaques de salud. Según desvela la periodista Pilar Eyre, Juan Carlos Iestá pasando por el que es, con total seguridad, el momento más duro de su vida. 

En concreto ha desvelado en su blog que el monarca ha sufrido un ataque de ansiedad y ha necesitado de atención médica. Este medio de comunicación se ha puesto en contacto con la autora de la información, y Pilar Eyre ha reiterado que, efectivamente «se encontró mal e hicieron ir a un médico. Tras el ataque de ansiedad, el Rey está teniendo sesiones diarias, además, con un fisioterapeuta para poder recuperarse». 

La bomba estallaba dentro del palacio de la Zarzuela el pasado miércoles 11 de julio cuando el diario EL ESPAÑOL publicaba unas cintas donde se escuchaba perfectamente a la princesa Corinna zu Sayn-Wittgenstein (53) en conversación con el comisario José Manuel Villarejo y el empresario Juan Villalonga asegurando que Juan Carlos I la usaba como testaferro con terrenos adquiridos en Marrakech y, además, afirmando que el soberano poseía cuentas en Suiza a nombre de su primo, Álvaro de Orléans y Borbón.

Las sombras más oscuras planean de nuevo alrededor de los Borbones. Al escándalo que implica directamente a quien fuera jefe del Estado español durante cuarenta años hay que añadirle el ingreso en prisión del marido de una de las infantas, Iñaki Urdangarin (50), el primer miembro de la familia del Rey en pisar la cárcel. Otro duro golpe para el reinado de Felipe VI (50), cuya situación familiar y dinástica vive sus horas más bajas.

Entre tanto, y mientras Casa Real planea el acto para la aparición tradicional en Palma de Mallorca, el rey emérito, recuperado del susto, disfrutaba este fin de semana de unos días en Sanxenxo (Pontevedra), lugar en el que iba a participar en las regatas que, finalmente, se han cancelado por motivos ajenos a él.

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