La Princesa prendió la mecha de las movilizaciones, pero la protesta contra el plan de cierres, privatizaciones y transformación de centros sanitarios del Gobierno regional no ha dejado de crecer. La marea blanca ha llegado en forma de encierros a los seis hospitales cuya gestión se privatizará, primero, al Carlos III (futuro centro de media estancia) después, y finalmente a hospitales que no están tan afectados por las medidas (Niño Jesús, Príncipe de Asturias, 12 de Octubre, Severo Ochoa, Getafe y Gregorio Marañón). Este último hospital inició su encierro ayer mismo en el aula magna. A media tarde, una treintena de personas empezaban a pintar pancartas y a distribuir hojas informativas. El comité de empresa recuperó para la ocasión el ataúd con el que recibían al exconsejero Güemes en las protestas contra la privatización en 2008.