Vivir por encima de nuestras posibilidades en sanidad pública (I)

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Una frase inicia el camino para convertirse en tópico: “los españoles hemos vivido por encima de nuestras posibilidades”. La frase han empezado a usarla algunos políticos y va camino de convertirse en un burladero tras el que ocultar o diluir las responsabilidades de la crisis pero, afortunadamente, hay quien se rebela ante este intento de diluir responsabilidades.¿Hemos “vivido por encima de nuestras posibilidades” en sanidad pública en España?

Intentaré aquí responder a esta pregunta con datos. Empiezo por concretar qué es eso de “vivir por encima de nuestras posibilidades”. Lo de “vivir” lo hago corresponder con «gastar”; es decir, con el gasto sanitario público per cápita.  Lo de “nuestras posibilidades” se correspondería con “la riqueza”; es decir, con el PIB per cápita. Si hemos gastado en sanidad pública más que lo que nos correspondería por riqueza es posible que hayamos “vivido por encima de nuestras posibilidades” en sanidad pública. En caso contrario, será muy difícil que se pueda concluir tal cosa. Yo sólo conozco dos modos de aproximarnos a la cuestión. En esta entrada lo hare de modo comparativo, situando a España en el conjunto de países de nuestro entorno socioeconómico y elijo, para ello, el conjunto de los 22 países europeos que en 2009 (último año para el que dispongo de datos) formaban parte de la OCDE. En la siguiente entrada lo haré de modo no comparativo, teniendo en cuenta datos únicamente referidos a España.

El MODO COMPARATIVO consiste en situar nuestro gasto sanitario público per cápita y nuestro PIB per cápita con el conjunto de la Europa de la OCDE. Lo hicimos en un trabajo publicado en 2004 y comprobamos que nuestro gasto sanitario público per cápita entre 1980 y 2001 era muy inferior al que nos correspodía por riqueza comparándonos con este grupo de países. ¿Y qué ha pasado desde 2001 hasta hoy? ¿Hemos aumentado nuestro gasto sanitario público en relación con el promedio de estos países? Probablemente sí, pero ¿tanto como para poder afirmar que gastamos en sanidad pública lo que nos corresponde (o más) por nuestra riqueza? Veámoslo. Para ello hago uso de la última edición de la base Health Data OCDE de que dispongo, la de 2009, que incluye datos hasta 2007. Construyo la Gráfica 1 en la que se compara el gasto sanitario público per cápita y el PIB per cápita españoles con el promedio de los 22 países europeos de la OCDE (promedio=100) entre 1980 y 2007. España se incluye en el cálculo de este promedio. Los cálculos se han hecho expresando el gasto sanitario público per cápita y el PIB per cápita en dólares estadounidenses por paridad de poder de compra. Se consigue igualar así la capacidad adquisitiva de las monedas entre sí y facilitar las comparaciones entre países

CONCLUSIÓN
Nuestro PIB per cápita y nuestro gasto sanitario público per cápita se han aproximado progresivamente entre 1980 y 2007 al promedio europeo. Pero nuestro gasto sanitario público ha sido siempre inferior (entre 7 y 18,4 puntos porcentuales según años) a nuestro nivel de riqueza. Por lo tanto, no se puede afirmar que, en comparación con la Europa desarrollada, hayamos “vivido por encima de nuestras posibilidades” en cuanto al gasto público sanitario. Ha ocurrido precisamente lo contrario: hemos gastado en todo momento menos que lo que nos podíamos permitir por nuestro nivel de riqueza. ¿Qué han hecho otros? Veámoslo.

GASTO SANITARIO PÚBLICO EN LAS ECONOMÍAS PORCINAS Y NO PORCINAS

El término PIGS (literalmente, «CERDOS» en inglés) es un acrónimo peyorativo con el que medios financieros anglosajones se refieren a la fragilidad del crecimiento económico de un grupo de países, históricamente pobres, del sur de la Unión Europea: Portugal, Italia, Grecia y España. Tras la crisis de 2008, a veces se reemplaza a Italia por Irlanda, o simplemente se añade Irlanda (con el acrónimo PIIGS) para referirse a este grupo de países, protagonistas de un acelerado crecimiento económico en los años 90 pero que ahora sufren una crisis aumentada en comparación con el resto de Europa. El término ha sido especialmente usado por el Financial Times haciendo referencia a una frase hecha para designar algo inverosímil o imposible: flying pig (cerdo que vuela). «Hace ocho años, los cerdos llegaron realmente a volar. Sus economías se dispararon después de unirse a la eurozona. (…) Ahora los cerdos están cayendo de nuevo a tierra«, afirmaba el Financial Times. Veamos, pues, al igual que hemos visto en el caso de España, la evolución del gasto sanitario público per cápita y del PIB per cápita de algunos países europeos seleccionados, pertenecientes unos a la eurozona y otros no, unos tildados de PIGS y otros no, pero todos miembros de la Unión Europea (UE) y de la OCDE.


PAÍSES DE LA UE, DEL EURO Y NO PIGS
PAÍSES DE LA UE, DEL EURO Y PIGS
PAÍSES DE LA UE PERO NO DEL EURO

MORALEJA

Todos sabemos que la voz cantante sobre lo que hay que hacer para superar la crisis en la eurozona la llevan Alemania y Francia, precisamente dos de los países cuyo gasto sanitario público ha sido durante las dos últimas décadas no sólo muy superior al promedio del grupo de países europeos de la OCDE sino también sustancialmente superior al que les correspondería por riqueza. Se pretende que los PIGS mediterráneos reduzcan su gasto público (incluye el sanitario, claro). Ninguno de los PIGS mediterráneos ha tenido nunca un gasto sanitario público en la media europea, salvo Italia, pero al menos Italia mostraba al mismo tiempo un PIB per cápita también en el promedio europeo o incluso superior. Salvo Italia, y sólo durante 2 años (1990 y 1991), ninguno de los PIGS mediterráneos (tampoco Irlanda) ha tenido nunca un gasto sanitario público per cápita superior a su PIB per cápita en relación con el promedio europeo.

Quién “ha vivido por encima de sus posibilidades” en sanidad pública durante las últimas dos décadas en la eurozona?

Los lectores de SALUD, DINERO Y… ATENCIÓN PRIMARIA ya conocen la respuesta.

Coordinadora Anti-Privatización de la Sanidad Pública de Madrid (CAS). www.casmadrid.org

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