Cuatro rehenes de las FARC muertos en un intento fallido de rescate

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Helicóptero

Algunos de los fallecidos permanecían en poder de la guerrilla desde hace más de 12 años, según el gobierno.

 

Una operación para rescatar a varios rehenes de la guerrilla de las FARC acabó con la muerte de cuatro de los secuestrados, según informó al mediodía del sábado el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón.

Pinzón dijo en rueda de prensa que los rehenes, todos miembros de las fuerzas de seguridad, fueron ejecutados, tres de ellos con disparos en la cabeza y uno de ellos en la espalda, cuando las tropas colombianas se aproximaban al campamento de la guerrilla.

Todos los ejecutados permanecían en manos de las FARC desde al menos 1999 y entre ellos se encuentra el sargento del ejército José Libio Martínez, secuestrado hace casi 14 años.

Avanzaza la tarde, fuentes oficiales informaron que habían hallado vivo en la misma zona a otro rehén, el suboficial de la policía Luis Alberto Erazo Maya, quien permanecía retenido por las FARC desde el 9 de diciembre de 1999.

Tras las ejecuciones de este sábado, las FARC aún retienen a 14 policías y soldados.

Durante años, la guerrilla y el gobierno han negociado para canjear a esos rehenes por guerrilleros presos.

Nuevo líder

LOS FALLECIDOS

  • Coronel Edgar Yesid Duarte Valero (policía nacional). Secuestrado el 14 de octubre de 1998 en Paujil (Caqueta)
  • Mayor Elkin Hernández Rivas (policía nacional). Secuestrado el 14 de octubre de 1998 en Paujil (Caqueta)
  • Sargento Mayor José Libio Martínez Estrada (Ejército). Secuestrado el 20 de diciembre de 1997 en Patascoy (Nariño).
  • Intendente Jefe Álvaro Moreno (policía nacional). Secuestrado el 9 de diciembre de 1999 en Curillo (Caqueta).

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, afirmó que las FARC son los «únicos responsables» de la muerte de cuatro secuestrados, lo que calificó como una «acción vil».

«Ya me imagino que van a querer comenzar a decir que fue la fuerza pública», dijo Santos durante su habitual actividad pública de los sábados, al señalar que los culpables son quienes les secuestraron y «apretaron el gatillo».

Figuras de uno y otro lado del espectro político reaccionaron con indignación al conocer la noticia.

«Las Farc vuelven a cometer un crimen de guerra al asesinar a sus rehenes», dijo el alcalde electo de Bogotá, Gustavo Petro, del movimiento Progresistas.

«El comandante del frente debe ser procesado como criminal de guerra», sostuvo el político en declaraciones recogidas por el diario colombiano El Tiempo.

Como recuerda el corresponsal de BBC Mundo en Bogotá, Arturo Wallace, en el pasado, las asociaciones de familiares de rehenes han criticado al gobierno por sus intentos de rescatarles en operaciones armadas, y han defendido la opción de la negociación con los guerrilleros.

Las FARC han matado al menos a otros diez rehenes en previos intentos de rescate, según informa Wallace.

Asociaciones de victimas, criticaron al gobierno tras la operación. «Estos hechos son una muestra del fracaso de los rescates a sangre y fuego», afirmó la presidenta de Asfamipaz, Marleny Orjuela, en declaraciones a Efe.

Hace tres semanas, las Fuerzas Armadas asestaron un duro golpe a las FARC al abatir a su máximo líder, Alfonso Cano.

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